El secretario general del gremio, Roberto Fernández,
adelantó que decidieron no llevar a los planteles profesionales por la huelga
que realizan en reclamo de mejoras salariales
La fecha del fútbol argentino se encontró este viernes con
un inesperado escollo. Y no es la lluvia. Sucede que la UTA, el gremio que
agrupa a los choferes de micros de larga distancia, realiza medidas de fuerza
en reclamo de aumentos salariales y en contra de cambios a la jornada laboral.
Esta mañana, en diálogo con radio Mitre, el secretario
general del sindicato explicó que la medida de fuerza se extenderá a los
servicios que todos los fines de semana se utilizan para transportar a los
planteles profesionales. "Hasta que
no le encontremos solución al tema, vamos a seguir de esta manera",
indicó.
Los planteles de Primera División tienen capacidad económica
para buscar otras alternativas para viajar a los estadios, siempre y cuando no
dependan de los micros para hacer trayectos largos. En cambio, los clubes del
ascenso son los que más podrían sufrir los problemas con el transporte.
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