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sábado, 7 de diciembre de 2013

El PJ pampeano hizo su tenso congreso en Quemú, con la presencia de todos los popes

El sector oficialista de Compromiso Peronista se hizo presente con el gobernador y buena parte de su gabinete. También estuvieron Marín, Verna y Robledo.
La cita fue a las 2 de la tarde, en territorio vernista: Quemú Quemú, gobernada por Rodolfo “Fito” Calvo, fue el escenario del meneado congreso peronista en el que estuvieron presentes todos los sectores internos e incluso el gobernador Oscar Mario Jorge.  En medio de una interna sin precedentes, en un clima de inevitable tensión, los dirigentes firmaron un documento para expresar unidad.  De todos modos hubo reproches y pases de factura, después de una elección de la que el PJ pampeano salió herido, con una banca menos en el Congreso Nacional, con reproches que incluyeron la palabra “traición” y con un panorama complicado con vistas a 2015.
Aunque el sector oficialista de “Compromiso Peronista” se inclinó por asistir al congreso después de varias dudas, e incluso adelantó la presencia del jefe del Ejecutivo, le puso semejantes interrogantes al asunto que hasta llegó a impugnar una formalidad, advirtiendo que la convocatoria estaba mal hecha como para restarle legitimidad a una reunión que desde el mismo momento en que se tramó le quedó más cómoda y amable al vernismo y al marinismo que al jorgismo.  Además de marinistas y vernistas, el congreso tendrá la presencia -casi siempre sonora- del Nuevo Espacio de Participación (NEP) que lidera Roberto Robledo, que ya hizo escuchar sus quejas porque antes de los comicios del 27 de octubre, y después de las PASO del 11 de agosto, el oficialismo no convocó al resto de los sectores.
La presencia de “Compromiso Peronista” fue definida por la plana principal de ese sector, incluyendo a los intendentes que pisan fuerte, esta semana en una reunión en el Recreo Mercantil, de Santa Rosa.

El gobernador marcó públicamente algunos condicionamientos para su presencia, que posiblemente le serían garantizados por la organización, aunque hasta cierto punto. En principio, se anunció la idea de evitar el ingreso de militantes con bombos, con el objetivo de que los oradores no sean interrumpidos.  
Por su parte, el sector de la Plural aludió a la presencia de Jorge con una frase que, según como sea interpretada, puede ser un mimo o un desafío: “Lo vamos a tratar como a un buen compañero”, dijeron.
En las últimas horas, Convergencia insistió en la necesidad de mostrar “unidad”, que ha sido el caballito de batalla marinista en los últimos tiempos, pero que a la hora de la realidad se demostró un fracaso: el PJ tuvo una interna con ocho candidatos y salió de ese proceso con serias lesiones. 
 Cada uno de los sectores mayoritarios tiene cuentas pendientes con los demás, por lo que también es posible que -pese a la evidencia del enfrentamiento de intereses- puedan tramar una salida conciliada: así como Compromiso Peronista asoma como el más perdidoso del 27 de octubre, sobre el vernismo recaen las acusaciones de “traición” y el marinismo tuvo la responsabilidad del manejo del partido, sin llegar a buen puerto en la búsqueda de consenso, entre otras cosas porque el hijo del propio presidente, Espartaco Marín, no quiso bajar su postulación.
Fuente: El Diario de La Pampa


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