El viceintendente no se retractó y no pidió disculpas, quiso minimizar sus palabras contra las mujeres que están en situación de calle y a las que acusó de tener una enfermedad y hacerlo porque les gusta.
Pronunció la palabra “disculpas” pero las redujo a una “costillita” del hombre y sostuvo en su discurso la posición machista y posicionó a la mujer en un segundo lugar respecto del hombre.
A la salida, cuando una de las mujeres hizo lo que pidió, reclamarle una explicación, la insultó. La mujer le dijo “yo soy la que le gritó desde acá, la que le pide una explicación”. Luego de un cruce de pocas palabras, el funcionario se despachó: "Ma si, andá a la púta que te parió”, dijo Baraybar, e hizo el típico gesto que acompaña esas palabras. Movió su mano derecha, que la tenía a la altura de su cintura y la hizo llegar hasta detrás de su cabeza, en un movimiento casi ciruclar.
Luego se fue, siguió su camino, no dio las explicaciones y no escuchó, como lo propuso durante su discurso.
Las palabras de Baraybar en el recinto. “Unas pocas palabras a las mujeres que a Dios gracias hoy nos están acompañando acá. Me habrán sentido decir que lo más maravilloso que hizo el señor en este mundo lo hizo cuando creo esa maravilla, cuando nos sacó de una costillita, a la mujer, a la madre, a la esposa, a la amiga, todas angelicales que con su compañía nos ayudan a vivir en un mundo mucho mejor”, dijo.
"Jamás en mi vida hice nada que estuviera en contra o fuera a ofender a una mujer. Puede ser que la experiencia de tantos años de vida uno diga coas que pueden ser mal entendidas, o mal dichas, jamás haría algo contra las mujeres. Si he estado mal, no tengo ningún recato en pedir disculpas si es que realmente es así, ahora me gustaría que la que se sintió tocada, la que se sintió ofendida venga y me lo diga. Llevo 55 años de casado y siempre la inteligencia y al amor triunfó para la formación de una familia. Pienso que si alguna dama en alguna oportunidad por cualquier causa, siempre se llevó una respuesta positiva. Si no es así, me gustaría saber cuál es la realidad", agregó.
"No creo que esta estupidez que no corresponde, porque lo que hice fue una acotación al margen, se termine de una vez por todas. No tengan dudas de que van a encontrar en mí a alguien en quien confiar. Si alguna se sintió tocada..." dijo y fue interrumpido al grito de "todas". Baraybar retomó con un "perfecto, no fue mi intención, pero si alguna se sintió tocada, les pido disculpas. Seguiré en mi camino adorando a ese ser fenomenal que creó Dios". El repudio fue mayor: "¡Que se vaya!, ¡que se vaya!"
"A esas que me piden que me vaya, tienen las puertas abiertas de mi oficina y vengan y me lo digan en persona", invitó. Sin embargo, cuando una mujer se le acercó a pedirle explicaciones al finalizar la sesión, la mandó a "la puta que te parió".
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